martes, 17 de septiembre de 2013

¿Han muerto los iPods?


El primer modelo de iPod fue presentado el 22 de octubre de 2001. La posición que regenta Apple en el mercado en la actualidad tiene mucho que ver con esa fecha. Sus reproductores portátiles fueron un éxito sin precedentes, convirtiéndose en la puerta de entrada para muchos usuarios al ecosistema de la compañía. De aquella, los productos de Apple no formaban parte del mainstream tanto como ahora, donde algunos de sus dispositivos son los dominantes del sector. Los iPods catapultaron a la compañía a un nuevo lugar, introduciendo a millones de personas a su manera de hacer las cosas: hardware y software unidos para ofrecer la mejor experiencia.


iPod

Los smartphones ocupan los bolsillos de la mayoría de las personas. Cada vez ofrecen más funcionalidades y acaban absorbiendo otros productos que utilizábamos: algo que le está ocurriendo al iPod.


Confías o no confías en la NUBE ?

Un tercio de los responsables financieros confía en la nube para almacenar sus datos contables

Los departamentos financieros confían más en la nube que los responsables de tecnología cuando se trata de almacenar información sensible de sus empresas. Más del 35% de los directores financieros consideran la nube apropiada para guardar datos.
Más del 35% de los directores financieros consideran la nube apropiada para almacenar cifras confidenciales, facturas, reclamaciones de compañías aseguradoras y datos fiscales. Además, un porcentaje superior al 32% de los responsables de tecnología también aboga por guardar estos datos en la nube. Es decir, los responsables financieros en Europa podrían estar adoptando el almacenamiento de datos en la nube, sin entender que esto no reemplaza la necesidad de una estrategia de custodia externa y gestión de backup exhaustivas.

Estas conclusiones y datos se derivan de un estudio de la compañía de servicios de custodia y gestión de la información Iron Mountain. Además, el 92,2% de los responsables financieros en España considera que la responsabilidad de la protección de sus datos empresariales recae en el proveedor de servicios en la nube. Sin embargo, están en un error: la legislación de la UE sitúa claramente la responsabilidad de los datos perdidos o en peligro en las manos del que ostenta su propiedad.

Cuando se decide almacenar información sensible en la nube, los responsables financieros se muestran ligeramente menos preocupados que sus colegas responsables de tecnología. Los directores financieros tienden a preocuparse menos por la protección de datos (49% comparado con un 55% de directivos de TI), la seguridad y el cumplimiento de la normativa (45% frente a un 49%), y por si los datos pueden ser copiados o ser trasladados fuera de la empresa (23% comparado con 25%).

Ignacio Chico, director general de Iron Mountain España, aconseja que “antes de poner la información en la nube, hay que tener las cosas claras. La empresa propietaria de la información es la única responsable si ésta se pierde o se filtra. Es importante tener claro que el almacenamiento en la nube no reemplaza la necesidad de una estrategia de custodia y gestión de backup exhaustivas. Las empresas tienen que afrontar este reto, combinando los beneficios del almacenamiento en nube con la protección offline de los soportes magnéticos. No entender bien los riesgos asociados al almacenamiento en nube puede conducir a estrategias erróneas que expongan a las empresas al riesgo de sufrir brechas de datos y, consecuentemente, al impacto financiero asociado y a un daño en la reputación a largo plazo”.

Fuente: Iron Mountain.